Finca Valdelagua
Bodega Casa del Valle
Origen: Yepes (Toledo)
Uvas: 40% Cabernet Sauvignon, 40% Shiraz, 20% Merlot
Crianza: un año de barricas nuevas
P.V.P.: 14 €
Otros vinos de esta bodega:
Hacienda Casa del Valle Cabernet Sauvignon y Shiraz
Migas manchegas, con un hidalgo castellano
La apuesta que bodegas Olarra hizo por los secarrales de Toledo dio éxitos desde el primer día, pero ahora, ya más reposados y con viñas más maduras, los aromas y sabores empiezan a ser más profundos, más complejos.
El rigor del altiplano, con una climatología extrema, hace que la Shiraz no se vuelva empalagosa, sino compleja y los perfumes florales de la Merlot, se mantienen dentro de la potente estructura de boca que compone la Cabernet, con notas verdes a hierba y su famoso pimiento.
Es muy importante la crianza porque enmarca todo este torrente de perfumes y hasta se agradecen esos tonos dulces de vainilla y cacao.
Es muy importante la crianza porque enmarca todo este torrente de perfumes y hasta se agradecen esos tonos dulces de vainilla y cacao.
El Plato
Ver receta en Migas
Es una pena que con las migas suceda algo parecido a las atrocidades que se hacen con las tortillas de patata industriales, porque la verdad es que son un poco latosas de preparar y me vendría muy bien poder recomendar alguna marca, pero lo que se vende precocinado es realmente lamentable, así que a remover.
Yo las hago en un wok y resulta mucho más cómodo, fácil, resultón y hasta divertido de preparar, siempre y cuando haya unos cuando amiguetes ayudando y sirviendo vino.
La receta que doy es muy simple, pero a partir de esta se pueden añadir mil productos, desde sardinas arenques, hasta uvas o sobrasada, todo es ortodoxo y delicioso.
MARIDAJE
El mejor recuerdo de este vino lo tengo de un almuerzo en las viñas, con unas chuletillas a las brasas de sarmiento, contemplando la alfombra de olivos y viñas de la propiedad y, como las migas que mejor saben son las del amanecer en los Montes de Toledo, a cinco bajo cero y haciendo el reparto de puestos para la montería, pues se me ocurrió hacer la prueba y resultó formidable.
Tenía miedo a que los ahumados del pimentón del chorizo se cargasen los perfumes de crianza, pero en realidad solo se hecha lo justo para dar color y gracia, pues resultó que no, que estos se mantenían intactos.
A pesar de todo lo contado en su cata, este es un vino recio, poderoso, si no estuviese tan denostado el término, diría que hasta varonil, así que para un almuerzo o merienda a base de migas de pastor, es la medida.
Bueno de pastor, pastor, no.
Más bien de pastor hechas para los señoritos, es lo que por allí se llaman migas de rico.
En la receta aconsejo usar el wok para que sea más cómodo hacerlas en casa, pero si podemos acceder a un fuego de leña, es lo mejor.
Quizás sea sugestión o algún trasgo oculto, pero preparadas al aire libre, saben cien veces mejor.