Tapas de la casa
No todo han de ser pinchos en nuestra web, y menos, picantes o urticantes, por eso tenemos también tapas amables, de esas que hasta en la cocina mejicana no deben faltar para poder tomar resuello entre jalapeño y chipotle.
Un poquito de guacamole, vaya, que está tan rico y puede ser tan interesante o más que los propios chiles, aunque a la mayoría de los lectores les guste la traca.
En realidad esta sección se abrió en el 2007 cuando las Tapas empezaron a tomar carácter serio en nuestra gastronomía, y parecía que los certámenes iban por buen camino, con ciudades como Oviedo, Pamplona o Valladolid, que celebraban campeonatos para despertar el ingenio de cocineros y animar a los parroquianos a soltar el bolso a cambio de participar en las opiniones.
Desgraciadamente la fama llegó demasiado pronto. Las televisiones empezaron a crear nuevos ídolos, el papel couché impuso sus necesidades estéticas, los critiquillos afectados rechazaron la chistorra a cambio del crujiente con espuma, y nuestras tapas, nuestras maravillosas y engordantes tapas, empezaron a convertirse en eso que mi querido amigo Peio García Amiano definió como “Cocina en miniatura”. O sea, más Cocina de autor.
Yo dejo abierta esta sección para hacer eco de lo que suceda por nuestras provincias, pero me limitaré a dar cuenta de las notas de prensa que me sean debidamente cumplimentadas.
Las tapas se han convertido ya en un negocio para los “comunicadores”, así que cada cual pague sus tributos para apoyar su proyecto.
De momento, para mí un pincho es algo que ha de comerse con la mano, como mucho con un platito bajo la barbilla para no mancharnos el jersey. Cuando llego a un bar bullanguero, con apreturas y voces, y el camarero me dice como he de proceder para degustar la creación de su chef, me doy la vuelta y busco otro que no haya ganado ningún premio, porque las tapas fueron siempre eso, algo informal, sabroso, tradicional, arraigado en la tierra, un bocado que, con los ojos cerrados, nos diga que estamos en El Rastro madrileño, en el Albaicín de Granada, en los Remedios de Sevilla, en la Prete Vieja de San Sebastián, o en La Plaza Mayor de Valladolid.
No obstante, si han caído ustedes en esta página por casualidad, les remito a nuestra sección de Recetas de Aperitivos y Picoteos, donde encontrarán eso que siempre nos tienta: Boquerones en vinagre, Canapés, Champiñones al ajillo , Croquetas de jamón , Empanadillas caseras de bonito , Mejillones a la vinagreta , Patatas bravas , Trainerillas de anchoas y un largo etc., sin espumas ni otros crujientes que un buen pan de leña castellano.