Buñuelos de cebolla (sin gluten)
No sé si es correcto hablar de buñuelos, pero no quiero decir “Aros de cebolla rebozados” porque hay una especialidad gringa que se llama así, los famosos “Onion rings”, pero que no tiene nada que ver con esta, ya que aquella son aritos pasados por harina y pan rallado, mientras que estos son otra cosa.
La verdad es que los “Onion rings” están muy ricos, si se hacen bien, claro, un aperitivo muy agradable mientras se hacen las hamburguesas. Además se mojan en un tipo de salsa barbacoa, tan yankee ella, mientras que los míos van por caminos más orientales, incluso los sirvo con Tzatziki (Salsa de yogur y pepino), una salsita que me lleva a esas tierras de Oriente próximo.
Ingredientes
2 cebollas (unos 20 aritos)
2 huevos
200 g de harina sin gluten (100 de arroz, 50 de garbanzos y 50 de Maizena)
Levadura sin gluten.
Aceite de oliva virgen extra.
Sal y pimienta.
Elaboración
Para la masa, mezclamos bien el mix de harinas (se puede usar de Schär sin gluten), la levadura, sal y pimienta y las yemas de huevo.
Levantamos las claras a punto de nieve e incorporamos con una espátula, procurando que no se “caiga” demasiado.
Pelamos las cebollas y las cortamos en aros, despreciando las cabezas y culos, solo los aros más hermosos.
Ponemos a calentar abundante aceite en un cazo y, mientras coge buena temperatura (no hace falta que humee porque se quemarían por fuera y quedarían crudos en el interior), ponemos los aros en la masa y removemos para queden todos bien cubiertos.
Los freímos por tandas para que no se peguen entre sí. Se sacan a un papel absorbente y se sirven acompañadas de una ensalada de canónigos y/o una salsa Tzatziki (Salsa de yogur y pepino).
Maridaje
Cualquier vino blanco, incluso rosado, acompañará bien este aperitivo, aunque el más agradable es un cava brut nature.
Si optamos por un blanco, mejor afrutado, que hay legión, desde uvas gallegas, como Albariño, Treixadura o Godello, hasta los castellanos de Verdejo o algunos catalanes.