Pollo a la cerveza ( Bier huhn)
Tenía hoy el antojo de comer unas Patatas Hasselback, pero mi chica había pensado en un arroz con pollo, así que me dije “¿Y por qué no busco una receta sueca para el pollo y lo ponemos con las golosas patatas”, y dicho y hecho. Pero ni suecos, ni daneses, ni noruegos comen pollo, al menos tradicionalmente, así que tuve que bajar un poco hasta la gran Alemania y allí, allí sí comían pollo, y con una receta más que interesante.
Estuve dudando entre esta y otra receta alsaciana, pero en aquella el vino era importante y yo no tenía ni gota en casa. Son sabores sorprendentes, de hecho, cuando empezó la cocción, el olor era tan disuasorio, que pensé “Menos mal que tenemos las patatas, porque si no, adiós comida”. Pero cuando se acabó el guiso y lo probé, resultó ser una verdadera delicia, muy en el perfil ese de la cocina de Westfalia, de aromas suaves pero densos y sabores contundentes, propios de las regiones frías.
Elaboración
Picamos el ajo y la cebolla y los rehogamos en el aceite. Sin esperar a se dore, añadimos el pollo y las especias. Regamos con la cerveza y dejamos cocer un rato a sartén tapada.
Añadimos la nata y dejamos cocer hasta que empiece a ponerse la salsa cremosa. Retiramos las tajadas del ave y trituramos la salsa. En ese momento ponemos la yema de huevo cruda y batimos mucho. Es agradable y enriquece la salsa, pero es peligrosa porque se puede cuajar al recalentar y se haría grumos, perdiendo toda la cremosidad, así que este paso lo dejo en entre dicho.
Volvemos a meter el pollo, damos un recalentón y dejamos reposar hasta el momento de servir.
De guarnición ya dije que este plato era la disculpa para zamparme unas Patatas Hasselback, así que ya está todo dicho.
Maridajes
Blanco, sin duda, pero seco, tipo Chablis. Si conseguimos uno de estos vinos borgoñones, pues ideal, pero si no, en España ya se hacen muchos vinos monovarietales de Chardonnay. Para este plato elijo el Jean León Viña GIGI, aunque cuesta casi como un Chablis, 21€. Menos de la mitad de este precio, 9,50€, cuesta el otro, el Jean Leon 3055 Chardonnay, también muy rico, aunque menos elegante.