Restaurante Casa Xico

En realidad se trata de una tienda estanco donde, a fuerza de correrse la voz sobre la bondad de sus guisos, al final ya casi se dedican más a dar comidas que a otra cosa.

Cuando escribí por primera vez de esta casa en el periódico, los por entonces escasos clientes que guardaban celosamente el secreto de su fabada de verdinas, dijeron: “La jodimos, ya salió un listo levantando la liebre. De aquí a cuatro días ésto estará lleno y a tomar por saco los tortos, las verdinas, las cebollas rellenas y todo el coro celestial”.

Afortunadamente no ha sucedido así, al menos de momento, lo que sí es casi un milagro, es conseguir mesa.

Las verdinas son unas judías pequeñinas, extremadamente finas y muy sabrosas, típicas de Llanes, aunque en los últimos años se han popularizado por todo el Principado. Originariamente se cocinaban con ternera y ahora se hacen con marisco, pero que donde dan todo su potencial es guisadas en fabada, sobre todo al estilo llanisco, o sea con pantruque y probe (una especie de pelota de cocido hecha con maíz y morcilla también con maíz).

Es la cultura del maíz, recuerdo de hambres y de indianos, pero que nos ha dejado golosinas como éstas o como los tortos, otra gozada que en esta casa, acompañados de huevos y chorizo, son todo un regalo para paladares poco remilgados y estómagos resistentes.