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Lagar de Cervera 2014

Albariño Lagar de Cervera 2014
 
Albariño Lagar de Cervera 2014

Bodega Lagar de Cervera
http://www.lagardecervera.com/

D.O.: Rías Baixas
Uvas: 100% Albariño
Crianza: No
PVP: 9,50 €
 

You can see the English version by clicking on Lagar de Cervera with Chili con carne

Las brisas procedentes del Atlántico hacen que estas uvas lleven micropartículas de sal, lo que aporta frescor y alegría a un vino ya de por sí optimista, porque la uva albariño es el oro de Galicia y su alegría.

Es un vino aromático pero sin peripecias. La mano riojana del enólogo se deja ver y nos encontramos con uno de los vinos serios de esta vertiente.
Salen matices afrutados propios de la variedad, ese cocktail de piña, mango, melón, membrillo y algunos matices de hierba seca que se da en pocos albariños, y menos en los de la subzona de O Rosal, la más cálida y dulce de Galicia, pero por encima de todo es un vino seco, serio, que marca personalidad. Yo creo que también se nota la mano de Julio Sáenz en la viticultura, porque esta es una las poquísimas bodegas que se alimenta 100% de viñedos propios, lo que permite empezar a hacer el vino ya en la viña.

Chili con carne   

Puede parecer comida de ferroviarios tejanos desarrapados, pero les aseguro que nunca olvidaré el Chili con carne que preparaban en un conocido restaurante californiano de Madrid, y eso que no debía ser del todo artesano.
No lo juzguen por esas porquerías que se comercializan en conserva, es como si rechazasen los ravioli de carne por haberse atracado de latas cuando estaban en la universidad. Un buen Chili con carne es un plato riquísimo, duro, recio, pesado, pero sabrosísimo, sobre todo si se prepara con esmero como indicamos en el capítulo de recetas.
Los americanos lo comen hasta para desayunar, lo cual me parece una ordinariez, aunque en aquellas latitudes no creo que nadie se atreva a hacerlo a 40ºC, pero no lo desprecien en invierno, aunque chirríe un poco degustar Tex-Mex en una estación de esquí.
 

Maridaje 

Esta vez lo teníamos a huevo porque se trataba de un plato que echaba fuego y pedía a voces un vino blanco refrescante, con marcados tonos frutales y con una estructura de acidez capaz de soportar el sofocante ardor de las guindillas.
La uva Albariño suele reunir estas virtudes, así que nos dirigimos de cabeza a esta variedad. Es obvio que no todos los vinos de Rías Baixas son iguales, ni mucho menos, además este debía ser afrutado pero no intrascendente, de modo que apostamos por uno con apellidos riojanos, porque en esa región saben como vertebrar sus vinos (Julio Sáenz nació en Salamanca pero estudió enología la Universidad de La Rioja y entró en la bodega La Rioja Alta en 1996, así que es riojano). El resultado es tan delicioso que debería imponerse en todos los Tex-Mex, porque cambia la perspectiva del plato hasta hacerlo algo realmente exquisito.
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