Zamburiñas al ajillo
En realidad esta receta no debería ser tal, si no un complemento a la de Zamburinas a la plancha, pero como los robots de búsqueda son bastante necios, pues pongo otra y santas pascuas.
No voy a repetir lo ya dicho en aquella receta, así léanla porque si no se quedarán a uvas, solo reiterar mi reivindicación por uno de los moluscos más deliciosos y maltratados de las rías gallegas, porque si ya las vieiras deben comerse casi crudas para apreciar la deliciosa dulzura de su carne, las zamburiñas y volandeiras, cuyo músculo es apenas del tamaño de una cereza, pues calculen como queda si les arrean media hora de horno dentro de una empanada, o peor aún, con una de esas diabólicas salsa de tomate, pan rallado y hasta chorizo, que yo he visto en no pocos comedores gallegos.
La receta
En la otra receta recomendaba un cava brut nature y hacía mención al albariño Do Ferreiro Cepas Vellas. Al día siguiente, con mi amigo Andrés Proensa en casa, repetimos la jugada con estas zamburiñas al ajillo y un mágnum de ese vino. Una salvajada de cena, inolvidable, lástima que no estuviese Gerardo, el bodeguero, porque hubiera disfrutado.