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Bocaditos de queso con membrillo al sirope de Hierbaluisa

Bocaditos de queso con membrillo al sirope de Hierbaluisa
 
Bocaditos de queso con membrillo al sirope de Hierbaluisa
Bocaditos de queso con membrillo al sirope de Hierbaluisa

Publicado solo en gallego en el libro A Cociña do Inverno, de la colección Cociña Galega das Estacións, año 1995.

INGREDIENTES (4 personas) 

3/4 de kilo de queso del pais
1/2 kilo de dulce de membrillo auténtico
3 huevos
100 grs de harina
1/4 Kg de azucar
1 limón
12 hojas de hierbaluisa

Uno de los postres mas ricos y con más profundo recuerdo casero es el queso con membrillo. Pero siempre había un problema, cuando no te faltaba queso te sobraba membrillo, bueno o al revés, que es lo mismo. De esta forma se soluciona el problema y de ahí que algunos recetarios gallegos incluyan esta receta para evitar la muerte por indigestíon de los amantes del queso con membrillo.

Lo de la hierbaluisa es mio, claro, pero es que eso de poner azucar por encima de un postre me pone nervioso y con esta especia resulta delicioso.

Puesta en marcha:

1. Preparación: se corta a cuchillo el queso procurando obtener trozos del mismo tamaño y grosor, que a ser posible debe ser bastante fino. Se cuentan los trozos obtenidos y se corta el membrillo procurando obtener la mitad de porciones que de queso. Si el número de porciones de queso es impar, pues la cocinera se come el que sobra y en paz.

2. Se preparan los bocaditos poniendo una loncha de membrillo entre dos de queso, se aplasta un poco para que se peguen y se pasan por harina.

3. Al momento de freir se pone una sartén de asas con abundante aceite muy caliente y se van cogiendo los bocaditos y pasándolos por un plato sopero donde estarán los huevos batidos, cuando estén bien embadurnados de huevo se pasan a la sartén y se frien hasta que tomen un bello color dorado, luego se ponen a escurrir en una servilleta de papel. Hay quien los empana, a mi me parece muy basto.

4. Para el sirope se pone el azucar en una sartén y se calienta hasta que se funda procurando retirarlo antes de que tome mucho color, entonces se añade una copita de orujo y el zumo de medio limón, en este orden, luego de lleva al fuego para que se disuelva bien el caramelo y cuando esté bien liquido se ponen las hojas de hierba luisa, ya fuera del fuego. Se deja reposar y ya está listo.

Terminación del plato:  

Los bocaditos deben llegar calientes a la mesa para que es queso esté un poco fundido, pero como conservan muy bien el calor tampopco hay prisa. Hay quien es partidario de ponerles canela molida, yo creo que con sirope tienen bastante pero es cierto que tampoco es incompatible aunque si nadie lo pide es mejor no poner el frasco en la mesa para evitar tentaciones

 Vinos recomendados:  

Al ser un postre que se sirve caliente yo recomendaría un vino que pudiese tomarse frío, por ejemplo un moscatel de Málaga o de Valencia, los hay deliciosos, son relativamente baratos y por lo desconocidos que son, hasta resultan algo exóticos, incluso yo diría que un tanto snobs, algo así como un detalle de auténtico "conaisseur".

Menús sugeridos: 

- Ensalada de angulas con escarola
- Besugo de Navidad
- Bocaditos de queso con membrillo

Variantes de este plato 

Bocaditos de queso con crema de naranjas amargas.
La preparación de los bocaditos de queso con membrillo es identica a la anterior, lo que cambia es la salsa de acompañamiento. Para lograr esta crema pondremos en un cazo un poco de licor de naranja (Triple seco o Cointreau), el contenido de medio tarro de mermelada de naranja amarga y el zumo de un limón, se lleva a ebullición removiendo y se deja enfriar.
En un bol ponemos medio litro de nata bien fría y este a su vez se pone dentro de otro bol mayor con hielo picado, se monta la nata agitando y se incorpora lentamente la salsa de naranja. Esta crema debe quedar tan consistente que si se pone en los platos y se guarda en la nevera, cuando se coloquen encima los bocaditos de queso los aguantará sin que se hundan en ella.

Bocaditos de queso con avellanas
Esta sencilla variante tiene como objetivo principal introducir un elemento crujiente en una preparación que puede paracer simplona a causa de su textura demasiado suave. Consiste en picar las avellanas tostadas y poner una fina capa de ellas sobre la loncha de membrillo, luego se pone la otra loncha de queso y se presiona para que quede todo bien compacto.

Escrito por el (actualizado: 17/04/2014)