Jamoncitos de pollo al curry y crema de coco
En el sur de la India, donde se preparan las salsas más rabiosas, como la vindaloo, una variante del curry que abrasa la boca, decía que es habitual poner leche de coco para suavizar el guiso. Hace poco conseguí un delicioso curry de Madrás y un no menos aromático Garam Masala, con los que preparé platos como el Pollo con lentejas al curry de Madrás o el Pollo Garam Masala, que encandilaron a mi mujer. Pero se me acabaron las especias y ella quería volver a disfrutar de aquellos platos, de modo que compró un curry en un puesto del mercado, y me puse manos a la obra. Cuando lo probé creí que tendría que coger un extintor ¡Dios, como picaba!, de modo que, como ella aguanta poco el picante, recurrí a la crema de coco, una especia de leche concentrada. Es muy versátil, de hecho, ya venden algunas especiales para cocinar.
Al final el plato funcionó, aunque al primer bocado se puso como un camarón, pero luego ya fue tolerándolo.
Elaboración
En una sartén grande en que quepan todos los ingredientes, doramos a fuego fuerte los jamoncitos. Si se tuestan un poco, mejor, sin llegar a quemarse, claro.
Picamos los vegetales en mirepoix y los añadimos a la sartén u olla. Añadimos un poco de sal para acelerar el proceso de cocción y los dejamos confitar tapados.
Cuando estén blanditos, espolvoreamos con el curry. En Ingredientes digo “al gusto”, quiero decir que depende de la potencia de este y del gusto de los comensales, pero un curry no es especiar un poco el plato, como se suele hacer en España, si no hacer una salsa espesa a base de estas especias, algo que, a simple vista, puede parecer una animalada, pero es así, y si no gusta, pues guisen pollo a la cazadora.
Nos quedamos en el curry, pero este es el momento de poner la nata. Veremos que se disuelve muy bien, como la de vacas. Dejamos compenetrar un poco los sabores, y pasamos la salsa según nos guste más o menos fina, de hecho, generalmente yo la dejo entera, porque es como más le gusta a mi mujer.
Guarnición obligada es un Arroz Basmati , que se puede enriquecer como el Arroz Basmati con garbanzos o el Arroz Basmati con puerro, cualquiera de ellos es perfecto.
Maridaje
Es obvio que hay que elegir un vino refrescante. En India preparan sus deliciosas raitas (Sopa de yogur y pepino (Djadjik en la cocina sefardí, Cacik en la ...), y es una delicia refrescar la boca y calmar las papilar con esta refrescante bebida.
Aquí tenemos que entrarle a un vino, pero joven, perfumado y fresquito. Yo me decantaría por un Gewürztraminer o un Sauvignon Blanc, como el Gewürztraminer Sant Iscle, de D.O Pla de Bages, elSumarroca Gewurtztraminer, de D.O.Penedès, o el Blanco Nieva Sauvignon Blanc, de la D.O. Rueda.
¿Y un spumanti? Pues divino. Estos son mis preferidos:Berlucchi Franciacorta '61 Satèn, DOCG Franciacorta, Fontanafredda Asti,DOCG Asti spumante, Maschio, DOCG Conegliano Prosecco.