Sindicación de contenidos
Boletín electrónico
Contacto
Mapa web
Logo de FacebookLogo de Google +Logotipo Twitter
 
boton pinteres
Imprime ContenidoEnviar a un Amigo
 

${estadoCorreo}

 

Monte Blanco

Monte Blanco
 
Monte Blanco
Bodegas Monte Blanco
D.O.: Rueda
Uvas: 100% Verdejo
Crianza: No
PVP: 5.50€
 

 

 Extracto del libro Un vino para cada pincho, maridajes de la Cocina Canalla.

En este despotorro en que se ha convertido la zona de vinos blancos más explosiva del país, surgen de tarde en tarde iniciativas serias que nos devuelven la confianza en una uva que nos enamoró en los años ochenta y de la que ya hasta empezábamos a desconfiar.

De la mano del grupo Ramón Bilbao, esta nueva bodega ha salido al mercado rompiendo moldes y ganando premios allá donde va.
Es un vino sin trampas, con los sabores puros de la Verdejo, pero con un tratamiento en vendimia que saca lo mejor de la uva hasta el punto de enamorarnos al primer sorbo.
Tiene esos matices herbáceos propios de la variedad, pero con una carga de frutas ácidas, tipo maracuyá y pomelo, que hacen presagiar un vinito comercial. Nada de eso, el vino es seco, refrescante y tan potente en boca, que bien permite servirse incluso con carnes, sobre todo con parrilladas de menudillos de cordero. 

Ensaladilla rusa 

No voy a negar que este es uno de platos más marranos de cocina española, porque comer patatas con mahonesa es el colmo de la glotonería, pero junto a las croquetas y empanadillas, no me digan que no es también uno de los más irresistibles.
Hay muchas ensaladillas, por desgracia casi todas asquerosas porque se hacen con vegetales congelados y salsa de bote, pero yo probé una en Jerez por la que volvería a cruzar toda España. El truco consiste en cocer unas gambas blancas y, en ese mismo agua, hervir las patatas y la zanahoria para que cojan el sabor. Luego, una vez frías, se pican al tamaño de un guisante y se mezclan con las gambas troceaditas, no con bonito, que ya sería empastar el colmo de lo “empastable”, sino con gambitas y guisantes. Resulta un poco latosa de preparar, pero el resultado es como para alimentarse con ella todo el verano. 

Maridaje 

Me encanta convertir un plato canalla en un fastuoso banquete.
Esa fue la principal motivación de este libro. Un plato de ensaladilla de menú de camioneros con un vaso de vino con gaseosa es una ordinariez casi repulsiva (yo a veces lo hago, pero reconozco que es una cerdada). Una ensaladilla mimada, con gambitas y mahonesa casera, acompañada de este verdejo, les aseguro que es de una finura y una riqueza de matices, que bien podría servirse en el Crillon de París.
El ajustado precio de este vino permite hacer mil pruebas, entre otras cosas porque difícil será encontrar algún plato que no se vea reforzado por tan elegante vino. Hay verdejos mucho más baratos, pero pertenecen a otra dimensión, casi a la categoría de menú del día.
Escrito por el (actualizado: 29/12/2013)